La legendaria banda punk The Damned regresa a la Argentina tras 12 años, trayendo consigo una explosión de energía y actitud en un contexto caótico. En una semana marcada por incidentes como un patrullero incendiado y el Congreso bajo asedio, la presentación de la banda se convierte en un faro de liberación y rebeldía en una Buenos Aires intensa y plebeya.
El sábado a las nueve de la noche, el Teatro Flores se llena de calor. Después de 13 años, esta banda de culto se presenta ante un público ansioso. En la escena del punk, pocos se sientan en la mesa de los próceres junto a Ramones, Sex Pistols y The Clash. Sin embargo, The Damned marcó el inicio del movimiento punk con su primera gira, primer single y primer disco, ofreciendo un escape a una juventud que se siente atrapada en una sociedad gris.
Una Noche Histórica para el Punk Argentino
Apenas unas cuadras del púlpito donde Jorge Bergoglio solía celebrar misa, The Damned se presenta en el escenario. Dan las 21:15 cuando el telón se abre. El guitarrista Captain Sensible aparece con su característico paso de ganso, seguido por el vocalista Dave Vanian y el resto de la formación clásica. Sin tiempo para presentaciones, Love Song da inicio a la velada.
El capitán, con su boina roja y camiseta a rayas, lleva la desfachatez como estandarte, mientras Vanian, el padre de vampiros, se presenta con un look que recuerda a una mezcla entre Elvis y Johnny Cash. Temas como Machine Gun Etiquette y Lively Arts completan un cuarteto inicial contundente.
La banda muestra una gran forma y suena potente. Rat Scabies, regresando tras un largo período, aporta su energía inconfundible. El público, sediento de punk, responde a cada golpe de batería. Gun Fury resuena como un grito de protesta, y I Cant Just Be Happy Today revela la faceta gótica de la banda.
El contraste entre Sensible y Vanian añade dinamismo al espectáculo: uno lleno de colores y movimientos, el otro con la solemnidad de un maestro de ceremonias. Esta dualidad se convierte en el reflejo del espíritu del grupo, que mezcla parodia y reverencia por el rock.
El show avanza con fuerza, y Neat Neat Neat se convierte en el broche de oro, llevando al público a un pogo furioso. La conexión entre la banda y los asistentes es palpable, forjada en un ambiente donde el peligro se celebra.
Antes de que The Damned cierre su actuación, el ambiente se calienta aún más con la actuación de TV Smith de The Adverts, quien había calentado al público con su guitarra acústica. La banda local Semilla de Maldad abre el evento, preparando el terreno para la leyenda.
Tras abandonar el escenario, The Damned regresa para un encore, comenzando con Curtain Call y culminando en un explosivo New Rose, himno del punk. El ambiente se electrifica, y la energía en el Teatro Flores es innegable.
Al final, Sensible rinde homenaje a su compañero fallecido, Brian James, lanzando rosas al público. Con Smash It Up, cierran una noche memorable, reafirmando que, por un momento, el underground de Londres había plantado su bandera en Buenos Aires. Cuatro aventureros, con un promedio de 70 años, demostraron que el espíritu del punk sigue vivo.
